Y sigo acá, escribiéndote como una idiota. No sólo eso, también llorando como una idiota, pensándote como una idiota, extrañándote como una idiota... ¿y vos? Después me decís que no hay diferencias entre una cosa y la otra (vos sabés) y sí que las hay y se ven claramente. Te tragó la tierra y es por eso! Por esa maldita diferencia no puedo hablar con vos, no te conectás, no te puedo mandar ni un puto mensaje. También me decís que siga con mi vida normal... ¿Cómo carajo hago? A ver, no puedo ni disfrutar estar con una persona (y qué persona) por pensar en vos. Dios, qué bronca tengo.
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